Este enemigo tiene una mayor RES al Daño Destrucción.
Era una criatura remanente del Santuario del Nimbo, pero debido al poder divino del Centinela Imperator, adquirió conciencia y ahora tiene la responsabilidad de absorber y purificar las frecuencias contaminadas.
Con el tiempo, los oscuros deseos han ido consumiendo a Lorelei, transformándola en la Reina de la Noche. Busca sumergir el santuario en una oscuridad infinita para purgar todos los pecados.
Con su última chispa de cordura, Lorelei se selló en el atrio, donde canta una melancólica lamentación, esperando a quien pueda despertarla de este sombrío sueño.